La Reina Isabel II lleva un anillo de matrimonio que oculta un gravado en su parte interna. Este mensaje solo lo conocen ella y su esposo Felipe De Edimburgo.
Como es de costumbre en las familias reales siempre hay secretos que el publico desconoce. Ahora se ha dado a conocer uno de ellos que le pertenecía a la Reina Isabel.
Se trata de la única joya que la monarca británica no se ha quitado desde que contrajo matrimonio hace 73 años con Felipe de Edimburgo. Aquella boda real fue la primera en transmitirse a nivel mundial.
La pareja ha conformado el reinado más prolongado en la historia de Inglaterra. El duque de Edimburgo no gastó una libra en aquel anillo de oro, y a pesar de ello la reina siempre lo lleva consigo.
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Felipe ordenó que este se forjara con una pieza de oro que había recibido como obsequio de parte del pueblo de Gales. El duque solicitó que se le hiciera una grabación especial en la parte interna de la pieza.
Esta pequeña inscripción solo la han visto él y su esposa. La encargada de revelar este curioso secreto fue Ingrid Seward, quien escribió Prince Philip: A Portrait of the Duke of Edimburgo, una biografía autorizada del marido de Isabel II.
“La reina nunca se ha quitado el anillo, de ahí que nadie haya podido ver nunca qué fue lo que el duque puso dentro del mismo. (…) Los únicos que conocen ese secreto son la reina, su marido y el maestro que grabó la petición de Felipe”.
Vale resaltar que, el Duque tiene buen ojo para los anillos ya que también estuvo constantemente al pendiente de la sortija con la que le pidió matrimonio a la reina. Ésta también contó con la ayuda de la madre de Felipe, Alicia de Grecia, quien le entregó una tiara con diamantes para que de allí sustrajera la pieza para el compromiso.