El actor Armie Hammer le confesó a British GQ que a lo largo de la cuarentena se percató de que realmente necesitaba ayuda psicológica, por lo que inició unas sesiones de terapia,
Armie Hammer, explicó que el confinamiento por el coronavirus y el contexto mundial que se ha vivido durante el 2020 lo empujaron a recibir terapias para ayudarlo con su estabilidad emocional.
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La estrella explicó que en las semanas de cuarentena obligatoria su estatus emocional y psicológico se vio muy afectado. Además, se encontraba afrontando una dura separación de su esposa Elizabeth Chambers.
Ahora la celebridad, Hammer, afirma que su calidad de vida ha mejorado notoriamente desde que su proceso terapéutico inició.
«Viví un punto de inflexión muy importante y me di cuenta de que necesitaba más ayuda de la que yo mismo esperaba. Todavía trabajo con mi terapeuta al menos una vez por semana. Hubo un momento concreto en que mi estado mental no era nada positivo… Y curiosamente tuve un brote de claridad muy intenso que me abrió los ojos por completo. Constaté que no estaba bien y reuní el valor para buscar ayuda«.
Recientemente se estrenó la película protagonizada por Hammer y Lily James, el nombre de la cinta es Rebecca y es una producción original de Netflix.
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