El joven iraní de 27 años, Sam Asghari, confesó querer convertirse en padre muy pronto junto a su actual novia Britney Spears.
El modelo fitness tuvo un pasado muy difícil, ya que debió migrar a los 12 años a Estados Unidos sin su familia. Sam ha explicado que a todos les tomó años completar los requisitos migratorios, además de que necesitaron pasar una inspección con el FBI.
Asghari dejó a sus tres hermanas y a su madre atrás por una mejor vida durante algunos años, una experiencia que representó un shock cultural cuando llegó a EEUU con su padre, debido a que no conocía «ni una palabra» del idioma. Ambos compartieron mucho tiempo juntos, pese a que antes habían dejado de verse un tiempo, por lo que se convirtieron en compañeros.
Por ello, Sam afirma que ser padre es una de sus próximas metas y quiere cumplirla siendo joven. De momento, se desconoce cómo ha tomado Britney este anuncio.
La pareja se conoció durante la grabación del video musical de Slumber Party, un sencillo del disco Glory, de la icónica artista. Sam Asghari confesó que no pensaba presentarse para la filmación, sin embargo, la insistencia de un amigo lo hizo cambiar de opinión.